El gran paseo de los amigos del bosque
Era un hermoso día en el bosque. El sol brillaba y los pájaros cantaban. Los amigos, el conejo Rápido, la tortuga Lenta, y el loro Colorido, decidieron hacer un gran paseo. "¿Cuántos de nosotros somos?" - preguntó Rápido. "Tres amigos y un gran día para explorar", respondió Colorido con alegría.
Comenzaron a caminar por un sendero lleno de flores de todos los colores. "¿Cuántas flores podemos contar?", preguntó Lenta. "Uno, dos, tres, cuatro, cinco... ¡hay tantas!" - exclamó Colorido mientras volaba sobre las flores. ¡Era un espectáculo maravilloso!
De repente, encontraron un arroyo brillante. "¿Cuántos saltos puedo dar sobre el agua?", preguntó Rápido. "Yo soy más lenta, pero puedo cruzarlo cargando piedras pequeñas!" - dijo Lenta. Colorido, emocionado, propuso "¡Contemos juntos cuántos saltos lograremos!" Juntos saltaron y rieron mientras el agua brillaba bajo el sol.
Al continuar su paseo, se toparon con un gran árbol. "¿Cuántas ramas crees que tiene?" - preguntó Rápido. "Una, dos, tres... ¡mira cuántas!" - dijo Lenta con sorpresa. Colorido sugirió: "Podemos sentarnos bajo su sombra y contar las nubes en el cielo".
Mientras descansaban, un pequeño ratón apareció. "¿Pueden ayudarme? Me he perdido." - dijo asustado. "¿Cuántos amigos necesitas para encontrar tu hogar?" - preguntó Lenta. "¡Cuatro, yo también juego!" - agregó Colorido. Los amigos decidieron ayudar al ratón.
Tras ayudar al ratón a regresar a su casa, Rápido, Lenta y Colorido aprendieron algo valioso. "¿Qué aprendimos hoy?" - preguntó Rápido. "Que juntos somos más fuertes y siempre hay que ayudar a los amigos." - respondió Colorido. La moraleja del día fue que la amistad y la colaboración hacen todo más divertido y fácil.
FIN.