El gran paseo de los amigos del bosque
Era un hermoso día soleado en el bosque. Un grupo de amigos: dos ardillas, tres pajaritos y un conejito, decidieron salir a pasear. La ardilla más grande, que se llamaba Clara, gritó: - ¡Vamos a explorar! - Y todos estuvieron de acuerdo. Mientras caminaban, los pajaritos cantaban en el aire. ¿Te gustan las aventuras en el bosque?
A medida que avanzaban, llegó un momento en que encontraron un río brillante. - ¡Miren! - exclamó uno de los pajaritos. - ¡Podemos jugar en el agua! - Así que todos saltaron con alegría. La ardilla pequeña, llamada Lila, tenía un poco de miedo. - ¿Es seguro? - preguntó. ¿Te gusta jugar en el agua con tus amigos?
Después de brincar en el río, los amigos decidieron armar un picnic bajo un gran árbol. Trajeron nueces, frutas y flores. - ¡Qué rico todo! - dijo Clara mientras compartían su comida. El conejito, llamado Binky, no podía dejar de reír. - ¡Más por favor! - Todos se divirtieron mucho. ¿Te gusta compartir la comida con tus amigos?
De pronto, escucharon un ruido extraño en el arbusto. Los amigos se miraron asustados. - ¿Qué fue eso? - preguntó uno de los pajaritos. Al acercarse, se dieron cuenta de que era un pequeño erizo que estaba atascado. - ¡Ayuda! - gritó el erizo. Los amigos se unieron. - No te preocupes, ¡te ayudaremos! - gritaron al unísono. ¿Te gustaría ayudar a alguien que está en problemas?
Con mucho cuidado, y trabajando juntos, lograron liberar al pequeño erizo. - ¡Gracias, amigos! - dijo el erizo, feliz. - ¡Quiero unirme a ustedes! Todos se sonrieron y aceptaron. Ahora, eran siete amigos exploradores. ¿Te imaginas cuántos juegos podrían hacer juntos ahora?
Al final del día, mientras se despedían, Clara dijo: - ¡Hoy aprendimos que ayudar a otros siempre trae alegría! Todos asintieron con la cabeza. Desde entonces, el bosque se llenó de risas y nuevas aventuras. ¿Qué aprenderías tú al ayudar a alguien?
Moraleja: La amistad y la ayuda hacen que las aventuras sean más divertidas y coloridas.
FIN.