El gran picnic de la Estrella Feliz

En el bosque mágico de la Selva Alegre, vivían muchos animales encantadores que siempre estaban buscando maneras de divertirse y pasar tiempo juntos.

Un día, la Estrella Feliz, una brillante estrella que iluminaba el cielo nocturno, decidió organizar un gran picnic para todos los amiguitos del bosque. "¡Hola amiguitos! ¿Qué les parece si celebramos juntos con un delicioso picnic bajo mis brillantes destellos?" propuso la Estrella Feliz.

Todos los animales saltaron de alegría y comenzaron a prepararse para la emocionante reunión. El conejito Saltarín se encargó de traer zanahorias frescas, el pajarito Trinarín llevó semillas y frutas deliciosas, la tortuguita Cascabel preparó ensaladas verdes, y el osito Caramelito llevó miel y mermeladas.

Todos estaban tan emocionados que nadie podía dormir la noche anterior al picnic. Pero la sabia Lechuza de la Sabiduría les recordó que era importante dormir bien para disfrutar al máximo al día siguiente.

"Recuerden que para estar llenos de energía y alegría, es fundamental dormir bien" les dijo la Lechuza. Así que todos los animales se fueron a dormir temprano para estar descansados y radiantes al día siguiente.

Por la mañana, la Estrella Feliz les dio la bienvenida con su brillante sonrisa y les mostró un lugar perfecto para el picnic, junto a un arroyo cristalino y rodeado de flores de mil colores. Mientras disfrutaban de todas las delicias, la Estrella Feliz les contó historias sobre las constelaciones y les enseñó a reconocerlas en el cielo.

Los amiguitos del bosque se maravillaron con la magia de las estrellas y prometieron cuidar su hermoso hogar para que siempre brillara con fuerza.

Desde ese día, cada vez que veían la Estrella Feliz en el cielo, recordaban el increíble picnic y renovaban su compromiso de cuidar la naturaleza. Y así, la amistad, la diversión y el amor por la naturaleza brillaban más que nunca en la Selva Alegre.