El Gran Salto del Camaleón

En la selva vivía un camaleón llamado Camilito, famoso por su capacidad de cambiar de color para camuflarse. Sin embargo, Camilito tenía un problema: se enojaba con facilidad.

Un día, mientras saltaba de rama en rama, tropezó y cayó al suelo. Enojado y avergonzado, decidió emprender un viaje para aprender a controlar sus emociones. En su camino, conoció a la serpiente Sabrina, quien le enseñó a respirar profundo y contar hasta diez cuando sintiera enojo.

Luego, conoció al mono Marcelo, quien le mostró cómo divertirse y relajarse con juegos y risas cuando las cosas se ponían difíciles. Con estas lecciones, Camilito aprendió a controlar su enojo y a apreciar los pequeños momentos de felicidad en la vida.

De regreso a la selva, Camilito se convirtió en un ejemplo para todos, enseñando a sus amigos a controlar sus emociones y a disfrutar de la vida con alegría y calma.