El hechizo de doña Clementina


En un hermoso bosque, vivía un lindo pajarito llamado Pablito, quien tenía una amiga muy especial, la mariposa Sofía. Juntos volaban por los prados, entre risas y juegos, disfrutando de su amistad.

Sin embargo, la malvada doña Clementina, una bruja cascarrabias que vivía en las afueras del bosque, empezó a sentir celos de la bonita amistad que compartían Pablito y Sofía.

Una tarde, mientras los amigos jugaban en el claro del bosque, doña Clementina los hechizó con un conjuro maligno, haciendo que perdieran la capacidad de volar. - ¡Oh no, Sofía! ¡No puedo volar! - exclamó Pablito con preocupación. - Yo tampoco, Pablito. Parece que algo nos ha pasado - respondió Sofía con tristeza.

Sin poder entender por qué habían perdido sus alas, los amigos buscaron ayuda en los demás animales del bosque, pero ninguno sabía cómo romper el hechizo. Desesperados, decidieron ir a ver a doña Clementina.

- ¿Por qué nos ha hechizado, doña Clementina? ¿Qué le hemos hecho? - preguntó Pablito. - Estaba celosa de su amistad, y eso me hizo actuar de forma irracional. Pero ahora me doy cuenta de que cometer errores no ayuda a resolver los problemas.

Permítanme deshacer el hechizo y comprenderán que la amistad es valiosa y única - respondió doña Clementina arrepentida. Con un gesto de generosidad, la bruja rompió el hechizo y devolvió a Pablito y Sofía la capacidad de volar.

A partir de ese momento, los amigos comprendieron que la amistad es un tesoro que debe ser protegido y valorado. Perdonaron a doña Clementina y, gracias a su arrepentimiento, se hicieron amigos. Juntos, disfrutaron de la libertad de volar y vivieron muchas aventuras, fortaleciendo cada día más su preciosa amistad.

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