El hechizo de la amistad

- En la profunda oscuridad del bosque vivía una bruja llamada Elvira, quien era conocida por su gran corazón y su amor por la naturaleza. Un día, mientras recogía hierbas mágicas, encontró a un niño perdido llamado Mateo.-

¿Qué haces aquí, pequeño? -preguntó Elvira con ternura.- Me perdí en el bosque, señora -respondió Mateo con temor.- No te preocupes, aquí estarás a salvo. Ven conmigo a mi cabaña. Juntos descubriremos la mejor forma de regresar a tu casa.-

La bruja cuidó de Mateo y juntos pasaron días explorando el bosque y aprendiendo sobre plantas y animales mágicos. Un día, Elvira tuvo una brillante idea. Decidió hacer un hechizo para encontrar el camino de regreso a la casa de Mateo.

Utilizó hierbas, piedras y palabras mágicas para crear un poderoso hechizo. Cuando terminó, una luz brillante iluminó la habitación y una estrella dorada apareció frente a ellos.- Esa estrella nos guiará de regreso a tu hogar, Mateo.

Pero también nos enseñará que, a pesar de nuestras diferencias, la amistad y el amor siempre nos llevarán a casa -explicó Elvira con cariño.- Juntos siguieron la estrella, enfrentando desafíos y aprendiendo a confiar el uno en el otro.

Finalmente, llegaron a la casa de Mateo, donde su familia lo esperaba con alegría.- Gracias, Elvira, por todo lo que has hecho por mí. Nunca olvidaré nuestra aventura juntos -dijo Mateo con lágrimas en los ojos.-

Y yo nunca olvidaré el valor de la amistad y el amor que nos llevó a casa -respondió Elvira con una sonrisa.Cuando regresó a su cabaña, Elvira sintió una profunda alegría en su corazón, sabiendo que había encontrado un tesoro aún más valioso que cualquier hechizo: la verdadera amistad.