El Helado Mágico de Sofía


Había una vez una niña llamada Sofía, que todas las noches tenía sueños muy aterradores con un demonio. Cada vez que se acostaba en su cama, el demonio aparecía en sus pesadillas y la hacía llorar de miedo.

Sofía estaba cansada de tener miedo todas las noches, así que decidió buscar ayuda. Le contó a su mamá sobre los sueños horribles que tenía y cómo el demonio la asustaba tanto.

La mamá de Sofía escuchó atentamente y le dijo: "No te preocupes, cariño. Vamos a encontrar una solución juntas". Al día siguiente, la mamá llevó a Sofía al parque para distraerla un poco.

Mientras estaban allí, conocieron a un viejo sabio que vendía helados mágicos. El sabio se acercó a ellas y les dijo: "Tengo algo especial para ti, pequeña Sofía". Sacó un helado brillante y le explicó: "Este helado es mágico y te ayudará a vencer tus miedos".

Sofía estaba emocionada por probar ese helado tan especial. Lo tomó entre sus manos y lo saboreó lentamente. De repente, comenzó a sentirse valiente y decidida.

A partir de esa noche, cuando Sofía se acostaba en su cama, ya no temblaba de miedo ante el demonio en sus sueños. En cambio, cerraba los ojos con fuerza y pensaba en cosas hermosas como flores coloridas o paseos por el parque.

Un día mientras jugaba en el jardín trasero de su casa, Sofía encontró una caja misteriosa debajo de un árbol. La abrió con curiosidad y dentro encontró un libro antiguo. El libro tenía una portada dorada y letras brillantes que decían: "Cómo vencer tus miedos".

Sofía se sentó en el césped y comenzó a leer. Cada página estaba llena de consejos sobre cómo superar los temores y enfrentarse a ellos. Sofía aprendió que el demonio en sus sueños no era real, sino solo su imaginación asustándola.

Descubrió que podía controlar sus pensamientos y cambiarlos por cosas positivas. A medida que pasaba el tiempo, los sueños de Sofía se volvieron menos aterradores.

Aprendió a enfrentar al demonio en sus pesadillas con valentía, recordándole que ella era más fuerte de lo que él pensaba. Un día, Sofía tuvo otro sueño con el demonio, pero esta vez fue diferente. En lugar de llorar, ella lo miró directamente a los ojos y le dijo: "No tengo miedo de ti".

El demonio desapareció instantáneamente. Desde ese día en adelante, Sofía nunca más tuvo pesadillas con el demonio. Había superado su miedo gracias al helado mágico y al libro especial que encontró.

Sofía se dio cuenta de lo importante que es enfrentar nuestros temores en lugar de dejarlos controlarnos. Compartió su historia con otros niños para ayudarles a superar sus propios miedos. Y así, la niña valiente llamada Sofía vivió felizmente sin tener más pesadillas con el demonio.

Aprendió que siempre se puede encontrar una solución y que nunca debemos dejar que nuestros miedos nos controlen.

Dirección del Cuentito copiada!