El hermano mayor compasivo
Santiago era un niño muy activo y siempre estaba haciendo algo, pero lo que más le gustaba era ver videos en su iPad.
Aunque sus padres le decían que debía dormir temprano para estar descansado al día siguiente, Santiago siempre encontraba una excusa para quedarse despierto. Una noche, mientras se acostaba en la cama con su iPad en la mano, escuchó a su hermanito Milo llorar. Se levantó rápidamente y fue a ver qué pasaba.
"¿Qué te pasa, Milo?"- preguntó Santiago. "Tengo miedo"- respondió el pequeño. Santiago lo abrazó y le dijo:"No tengas miedo, yo estoy aquí contigo".
Después de consolar a su hermanito, Santiago se dio cuenta de que había estado siendo egoísta al querer quedarse despierto solo por diversión. Decidió hacerle caso a sus padres y comenzar a dormir temprano para poder estar más atento y ayudar a su familia cuando lo necesitaran.
Los días siguientes fueron difíciles para Santiago porque extrañaba ver sus videos nocturnos, pero poco a poco fue aprendiendo a disfrutar de otras actividades como leer libros antes de dormir o jugar juegos de mesa con Milo.
Además, notó que al estar más descansado podía enfocarse mejor en la escuela y tener mejores notas. Un día, mientras jugaban juntos en el parque, Milo se cayó del columpio y se lastimó el brazo. Santiago no dudó ni un segundo en correr hacia él para ayudarlo.
Mientras esperaban la llegada de los padres para llevarlo al hospital, Santiago mantuvo a Milo distraído contándole historias y cantando canciones. "Gracias, hermano"- dijo Milo mientras lo abrazaba. "No hay de qué, Milo.
Eso es lo que hacen los hermanos mayores: cuidar a los más pequeños"- respondió Santiago con una sonrisa. Desde ese día, Santiago se sintió muy orgulloso de ser el hermano mayor de Milo y prometió seguir cuidándolo siempre.
Aprendió que la familia es lo más importante y que a veces debemos dejar nuestras comodidades para ayudar a los demás. Y así, Santiago se convirtió en un chico más maduro y responsable gracias a su experiencia con su hermanito.
Y aunque extrañaba sus videos nocturnos, sabía que había encontrado algo mucho más valioso: el amor y la responsabilidad hacia su familia.
FIN.