El héroe de las palomas
Máximo Amir Bástian era un niño muy curioso y aventurero que vivía en la ciudad de Buenos Aires.
Un día, mientras caminaba por las calles del barrio de Palermo, se encontró con una gran sorpresa: un desfile militar que incluía soldados, bomberos, alumnos de la escuela Zahira y hasta una escolta. Máximo no podía creer lo que veía y decidió seguir el desfile para verlo más de cerca.
Cuando llegó a la Plaza Italia, donde se estaba llevando a cabo el evento, se acercó a uno de los soldados y le preguntó:- ¿Qué está pasando aquí? ¿Por qué hay tantas personas juntas? El soldado sonrió y le respondió:- Estamos celebrando el Día de la Independencia.
Es un día muy importante para nuestro país porque fue cuando logramos nuestra libertad. Máximo quedó impresionado por lo que escuchaba y decidió quedarse a ver todo el desfile.
Mientras tanto, los soldados marchaban al ritmo de la música patria, los bomberos mostraban sus equipos y habilidades para apagar incendios y los alumnos de la escuela Zahira cantaban canciones folclóricas. De repente, algo extraño sucedió: una bandada de palomas comenzaron a revolotear sobre el cielo azul.
Los pájaros parecían estar distraídos por algo en particular y volaban en círculos cada vez más cerrados. Los espectadores comenzaron a preocuparse por las aves ya que estaban demasiado cerca del recorrido del desfile.
Fue entonces cuando Máximo tuvo una idea brillante:- ¡Voy a ayudar a las palomas! -exclamó. Máximo corrió hacia la multitud y pidió ayuda para atrapar a las palomas.
Los soldados, bomberos y alumnos de la escuela Zahira se unieron a su causa y comenzaron a perseguir a los pájaros. Después de varios minutos de esfuerzo, lograron capturar todas las palomas y liberarlas en un parque cercano donde pudieran volar libremente sin peligro.
El desfile continuó con más música, baile y alegría gracias al esfuerzo de Máximo y sus nuevos amigos. Al final del día, todos los participantes se reunieron en el centro de la plaza para cantar el himno nacional.
Máximo se sintió muy orgulloso de haber ayudado a las palomas y también por haber sido parte del gran desfile del Día de la Independencia. Aprendió que siempre hay una manera de ayudar cuando alguien lo necesita, incluso si eso significa salirse del camino marcado.
Y así, Máximo Amir Bástian se convirtió en un héroe inesperado para todos aquellos que lo rodeaban.
FIN.