El héroe imaginario
Había una vez un chico llamado Martin, quien tenía una imaginación increíblemente poderosa. Cada día, Martin se sumergía en aventuras imaginarias en las que se convertía en un valiente guerrero o en un explorador intrépido.
A menudo, sus padres lo encontraban corriendo por la casa con su espada de juguete o buscando tesoros escondidos detrás de los muebles. Un día, mientras estaba jugando en el parque cerca de su casa, Martin notó algo extraño.
Había un grupo de niños mayores allí que estaban molestando a otro niño más pequeño. "Hey! ¿Por qué están haciendo eso?" preguntó Martin acercándose al grupo. "No es asunto tuyo" respondió uno de los niños mayores con arrogancia.
Martin sabía que no podía dejar que esto siguiera sucediendo así que decidió actuar. Con toda la valentía y determinación que pudo reunir, se enfrentó al matón principal del grupo y le dijo:"Deja a ese niño tranquilo.
No está bien lo que estás haciendo". El matón se rió y comenzó a burlarse de Martin por ser tan pequeño e insignificante comparado con ellos. Pero eso no detuvo a nuestro héroe infantil.
Con astucia y rapidez, logró distraerlos lo suficiente como para ayudar al niño más pequeño a escapar del parque sin ser lastimado. Los matones enfurecidos empezaron a perseguirlo pero gracias a su agilidad y velocidad logró huir sano y salvo del lugar.
Después de esa experiencia emocionante, Martin entendió la importancia de enfrentar y superar los obstáculos. También aprendió que no importa cuán pequeño o joven seas, siempre puedes hacer una diferencia positiva en el mundo.
Desde ese día en adelante, Martin se convirtió en un verdadero defensor de la justicia, ayudando a aquellos que necesitaban ayuda y luchando contra las injusticias dondequiera que las encontrara.
Y aunque su imaginación todavía lo llevaba a lugares lejanos e increíbles, sabía que lo más importante era mantenerse fiel a sus valores y principios. Y así fue como Martin se convirtió en un héroe infantil inspirador para todos los niños del vecindario.
FIN.