El héroe vikingo
Había una vez un vikingo llamado Olaf que vivía en una pequeña choza al pie de la montaña. Un día, decidió trepar hasta la cima para ver las vistas desde arriba.
Mientras escalaba, se encontró con su padre, quien estaba cuidando unas ovejas en la ladera. "¡Hola papá! ¿Qué haces aquí?" preguntó Olaf emocionado. "Estoy cuidando estas ovejas, hijo. ¿Qué te trae por aquí?""Solo quería ver las vistas desde arriba", respondió Olaf mientras seguía subiendo.
Una vez que llegó a la cima, se dio cuenta de que había una bruja bailando en un campo cercano. La bruja parecía estar disfrutando mucho y gritaba de alegría mientras danzaba.
"¿Quién eres tú?" preguntó Olaf a la bruja. "Soy la Bruja del Campo y estoy celebrando el cambio de estación", respondió ella sonriendo ampliamente. Olaf continuó caminando por el bosque cuando se topó con un hada peleando contra un búho gigante.
"¡Ayuda! ¡Este búho me está atacando!" gritaba el hada desesperada. Olaf no lo pensó dos veces y sacó su espada para ayudar al hada a defenderse del búho. Después de una intensa batalla, finalmente lograron vencer al ave gigante.
El hada le agradeció a Olaf su ayuda y le concedió tres deseos como recompensa. Pero él decidió usarlos sabiamente y pedir algo más valioso: conocimiento y sabiduría para poder ayudar a los demás siempre que lo necesiten.
Desde ese día, Olaf se convirtió en un héroe en su pueblo y todos acudían a él en busca de ayuda y consejo. Y así, aprendió que la verdadera recompensa es la satisfacción de hacer el bien por los demás.
FIN.