El jardín de la Alegría



Había una vez una joven llamada Lola, que sentía tristeza en su corazón. Un día, mientras paseaba por el parque, descubrió un jardín mágico y colorido.

Este jardín estaba lleno de flores brillantes, árboles frondosos y pequeños animales que jugueteaban entre las plantas. Lola se sintió atraída por la belleza del lugar y decidió explorarlo. Mientras recorría el jardín, se encontró con una anciana sabia y amable, que le sonrió con amor.

-¿Qué te trae a mi jardín, querida? -preguntó la anciana. -Estoy buscando la alegría, siento mucha tristeza en mi corazón -respondió Lola con sinceridad. La anciana le tomó la mano y la llevó a un rincón especial del jardín.

Allí, le enseñó a Lola a cuidar las flores, a escuchar el canto de los pájaros y a bailar con las mariposas. Poco a poco, Lola fue descubriendo la belleza de la naturaleza y el poder de la alegría que emanaba de ese lugar.

Con el tiempo, la tristeza se fue desvaneciendo y en su lugar creció la felicidad en el corazón de Lola. Ahora, ella cuida el jardín con amor y comparte su alegría con todos los que lo visitan, recordando siempre las enseñanzas de la anciana sabia.

El jardín se convirtió en un lugar de encuentro y diversión, donde las personas podían conectar con la naturaleza y encontrar la paz en su interior.

Y así, la joven Lola se convirtió en la guardiana de la alegría, difundiendo amor y felicidad a su alrededor.

FIN.

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