El Jardín de los Amigos Peludos



En un acogedor jardín de niños llamado "Rayito de Sol", los niños jugaban y aprendían juntos todos los días. Sin embargo, algo faltaba para que el lugar estuviera completamente lleno de alegría. La maestra Susana, una mujer amorosa y siempre sonriente, decidió que era hora de traer un poco de magia al jardín. Entonces, un día, llegaron al jardín dos visitantes muy especiales: un perro llamado Rocky y un gato llamado Luna. Los niños se llenaron de emoción al ver a estas adorables criaturas.

La maestra Susana les explicó a los niños que Rocky y Luna serían los nuevos amigos del jardín, y que todos tenían la responsabilidad de cuidarlos y darles mucho amor. La presencia de los animales en el jardín de niños cambió por completo el ambiente. Los niños estaban más felices, más tranquilos y más conectados con la naturaleza. Rocky y Luna eran expertos en recibir y dar amor, y no pasaba un día sin que los niños no se acercaran a acariciarlos y jugar con ellos.

Pero un día, algo triste sucedió. Rocky desapareció del jardín. Los niños estaban muy preocupados y tristes. Entonces, la maestra Susana los reunió y les dijo: "No se preocupen, amigos. Vamos a buscar a Rocky juntos. Recordemos que el amor que le dimos a Rocky lo hizo sentir especial, y estoy segura de que él está en algún lugar cercano, sintiendo nuestro cariño". Los niños se tomaron de la mano y comenzaron su búsqueda, cantando suavemente para llamar a su amigo animal.

Después de un rato, escucharon un ladrido a lo lejos. ¡Era Rocky! Siguiendo el sonido, encontraron a Rocky atrapado en un arbusto. Con mucho cuidado, lo liberaron y le dieron abrazos y caricias. Esa tarde, el jardín estaba lleno de risas y algarabía. Los niños aprendieron que el amor y la amistad pueden superar cualquier obstáculo, y que cuidar a los animales también es parte de ser buenos amigos.

Desde ese día, Rocky y Luna siguieron siendo los guardianes del jardín, siempre brindando amor y alegría a los pequeños. Y los niños, a su vez, aprendieron la valiosa lección de que el amor a los animales no solo beneficia a los animals amigos, sino que también llena sus propios corazones de felicidad y comprensión.

FIN.

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