El Jardín de los Gatitos
Era un día soleado en la casa de Pinwi y Tofi, dos adorables amigos que compartían una pequeña pero hermosa casa. Mientras tomaban un té en la terraza, miraban por la ventana a sus gatitos, Mimí y Tito, jugando en el patio.
"Me encantaría que tuviéramos un jardín solo para ellos, donde puedan correr y jugar sin preocupaciones!" - dijo Tofi con una sonrisa.
"Sí! Pero necesitamos que sea grande y bonito. ¿Sabías que el área total que deseamos es de 48 metros cuadrados?" - respondió Pinwi, mientras tomaba un sorbo de su té.
Tofi se quedó pensando por un momento. "Claro, pero ¿cuáles serían las dimensiones? No tengo idea de cómo calcular eso."
Pinwi se puso pensativo. "Yo sé que el ancho del jardín es 2 metros menos que la longitud. Si llamamos 'L' a la longitud y 'A' al ancho, entonces podemos escribir que A = L - 2."
"¡Genial! Entonces, el área del jardín se calcula multiplicando la longitud por el ancho, así que diríamos que: L * A = 48, ¿no?" - agregó Tofi mientras se acomodaba en su silla.
"Exactamente! Vamos a sustituir el ancho en la ecuación. Entonces se convierte en L * (L - 2) = 48" – explicó Pinwi con entusiasmo.
Tofi se iluminó. "¡Eso quiere decir que podemos resolver una ecuación cuadrática! Espero que me acuerde de cómo hacerlo…" - murmuró mientras buscaba papel para anotar.
Pinwi, emocionada, continuó: "Sí, lo primero que tenemos que hacer es expandir la ecuación..." - y ambos comenzaron a resolver la ecuación juntos. Después de un rato, Tofi exclamó:
"Esperá, concluí que L^2 - 2L - 48 = 0. ¿Ahora qué hacemos?"
"Debemos factorizar o usar la fórmula cuadrática. La fórmula es L = (-b ± √(b² - 4ac)) / (2a)" - explicó Pinwi mientras escribía las letras en el papel.
Después de mucho trabajar, encontraron que L = 8 o L = -6. "Como no podemos tener una longitud negativa, entonces L solo puede ser 8 metros. ¿Y el ancho?" - preguntó Tofi.
Pinwi se iluminó de nuevo. "¡A es igual a L - 2! Entonces, 8 - 2 es 6 metros!" - gritaron emocionados.
"Por fin tenemos las dimensiones: 8 metros de longitud y 6 metros de ancho. ¡El jardín va a ser perfecto para Mimí y Tito!" - celebró Tofi, saltando de alegría.
Pero de repente, una nube oscura cubrió el sol de su jardín, y ambos preguntaron:
"¿Qué pasa con el clima? ¿Y si llueve?" La idea de su hermoso jardín amenazaba con arruinarse.
"No te preocupes, podemos hacer un pequeño toldo sobre el jardín para que siempre esté protegido. Pero primero, necesitamos planear cómo lo decoraremos, para que sea un lugar mágico para los gatitos."
Así que fueron a la tienda de jardinería y compraron flores de colores, un árbol pequeño para que el sol no les falte a sus gatitos, y algunas casitas de madera donde pudieran descansar.
"¡Mirá! Estas florecitas son ideales, parecen las pelotas con las que juegan Mimí y Tito!" - comentó Pinwi mientras metía varias en el carrito.
"¿Y si hacemos un sendero de piedras? Así pueden caminar por él y no embarrarse. Y cerraremos el jardín con una cerca de madera. Si somos creativos, será el mejor jardín de todos!" - propuso Tofi.
Y así, bajo la guía de sus sueños y el deseo de hacer felices a sus gatitos, Pinwi y Tofi lograron armar no solo un jardín espectacular, sino también un bello recuerdo que atesorarían para siempre. Al final, se dieron cuenta que las mejores cosas nacen de la amistad, la creatividad y la resolución de problemas juntos.
Y así, cada tarde, Mimí y Tito exploraban libremente su nuevo jardín, corriendo entre las plantas, saltando por el sendero de piedras y tomando el sol con la felicidad de un hogar preparado con amor.
El jardín de los gatitos no solo se convirtió en un espacio verde y lleno de vida, sino también en un símbolo de las aventuras compartidas de Pinwi y Tofi, que una vez más habían demostrado que juntos podían lograr lo que se propusieran.
FIN.