El laberinto del jardinero amable

Había una vez dos amigas llamadas Sofía y Valentina que decidieron ir de excursión al bosque para disfrutar del aire fresco y la naturaleza. Pero mientras caminaban, se dieron cuenta de que se habían perdido en un laberinto.

Sofía comenzó a preocuparse mucho: "-Valen, ¿cómo saldremos de aquí? Estamos completamente perdidas". Valentina intentó mantener la calma y respondió con seguridad: "-Tranquila, amiga. Vamos a buscar una salida juntas".

Las dos niñas empezaron a caminar por el laberinto tratando de encontrar una salida. Después de un rato, se dieron cuenta de que estaban dando vueltas sin avanzar. Fue entonces cuando escucharon unos gritos lejanos.

Decidieron seguir los sonidos hasta llegar a una pequeña casita en medio del bosque donde encontraron a un anciano jardinero llamado Don Ernesto. Don Ernesto les preguntó qué hacían allí y las niñas le explicaron su situación.

El hombre les mostró un mapa del laberinto y les dio algunos consejos sobre cómo salir más rápido. Sofía estaba muy emocionada por haber encontrado ayuda pero Valentina notaba algo extraño en el hombre: sus ojos parecían tristes y su voz temblaba ligeramente.

Mientras seguían las indicaciones del mapa, Valentina decidió preguntarle al anciano si estaba bien: "-Don Ernesto, ¿está todo bien? Parece preocupado". El hombre suspiró profundamente antes de responder: "-No estoy pasando por mi mejor momento... hace poco perdí a mi esposa y me siento muy solo".

Sofía y Valentina se sintieron muy tristes por el dolor del anciano, pero también comprendieron que necesitaba ayuda. Decidieron invitarlo a unirse a su excursión para que no estuviera solo en el bosque.

Juntos, los tres continuaron caminando hasta encontrar la salida del laberinto. Don Ernesto estaba muy agradecido con las niñas por haberle dado compañía y les prometió cuidar mucho de su jardín.

Sofía y Valentina aprendieron una gran lección ese día: siempre hay que ayudar a los demás, incluso si están perdidos en un laberinto. Además, descubrieron que la amistad puede ser una gran herramienta para superar obstáculos difíciles y hacer nuevos amigos inesperados.