El Lazo de Amistad
En un orfanato de la ciudad, había dos hermanos llamados Johnny y Kelther. Ambos eran inseparables y siempre estaban juntos, jugando y cuidándose mutuamente. Un día, llegó una nueva niña al orfanato, una dulce y valiente pequeña llamada Beneditte. Desde el primer momento, Johnny y Kelther se sintieron atraídos por su alegría y encantadora sonrisa.
La directora del orfanato, sin embargo, no era amable con Beneditte. En lugar de cuidar de ella, la trataba mal, ignorando sus necesidades y haciendo que se sintiera sola. "No quiero que te acerques a los demás niños, Beneditte", le decía la directora. Pero, a pesar de todo, Beneditte era una niña fuerte.
Los dos hermanos, al darse cuenta de lo que sufría Beneditte, decidieron acercarse a ella para ofrecerle su amistad.
Johnny, con su encantadora sonrisa, le dijo:
"- ¡Hola, Beneditte! ¿Te gustaría jugar con nosotros?"
"- ¡Sí, por favor!", respondió Beneditte, con una chispa de esperanza en sus ojos.
Con el pasar de los días, los tres se unieron en una amistad inquebrantable. Beneditte sentía una conexión especial con Kelther porque él siempre estaba a su lado, brindándole apoyo y alegría en los momentos difíciles.
A medida que el tiempo pasaba, Johnny comenzó a notar que ambos, él y su hermano, se estaban enamorando de la misma niña. Sin embargo, él podía ver que Beneditte parecía continuar sintiendo una atracción especial por Kelther.
Un día, mientras jugaban en el jardín del orfanato, Johnny se armó de valor y habló con Kelther:
"- ¿Te gusta Beneditte? Yo creo que ella se siente feliz contigo. "
"- No lo sé, Johnny. Ella es una amiga increíble y siempre está ahí para nosotros. Pero, realmente disfrutamos pasar tiempo juntos", dijo Kelther, con una sonrisa sincera.
Ambos hermanos sabían que lo más importante era la felicidad de Beneditte. Así fue como decidieron apoyarla, sin importar sus propios sentimientos.
Un día inesperado, llegó una familia al orfanato con intenciones de adoptar. Tras una cálida conversación y una evaluación amable por parte de la directora, Johnny y Beneditte fueron elegidos.
"- ¿Estás lista para un nuevo capítulo, Beneditte? Esto puede ser emocionante", le dijo Johnny.
"- ¡Sí, estoy lista!", respondió ella con entusiasmo, aunque un poco de tristeza también llenaba su corazón al despedirse de Kelther.
Tras unas semanas de adaptación, Johnny y Beneditte se mudaron a una casa ¡justo al lado de la de Kelther!"- ¡Mirá, Kelther! ¡Estamos tan cerca!", exclamó Johnny emocionado.
"- Sí, podemos seguir viéndonos", dijo Kelther, quien sentía una mezcla de alegría y melancolía.
La amistad siguió creciendo. Un día, Beneditte le confesó a Johnny:
"- A veces siento que me gustaría estar más cerca de todos, pero no quiero que ni tú ni Kelther se sientan mal. "
"- Lo más importante es nuestro apoyo mutuo. Siempre seremos amigos, eso nunca cambiará", respondió Johnny.
Entonces, Beneditte tomó una decisión. "- Quiero organizar una fiesta de amistad en mi casa y invitar a toda la comunidad. Vamos a celebrar los lazos que hemos formado y la felicidad que hemos encontrado juntos".
Y así lo hicieron. La fiesta fue un gran éxito y todos se sintieron incluidos. Aquel día, el amor y la amistad llenaron sus corazones, y los tres hermanos sintieron que su vínculo se hizo aún más fuerte.
Con el tiempo, aprendieron que el amor no era solo romántico, sino que había distintas maneras de amar y cuidar a quienes están a nuestro alrededor.
Kelther, Johnny y Beneditte continuaron creciendo y compartiendo momentos felices juntos, conscientes de que la verdadera riqueza de la vida reside en las relaciones significativas y el amor que se construye entre amigos.
Nunca olvidaron el antiguo orfanato que los unió, pero siempre miraron hacia el futuro con esperanza, apoyándose mutuamente en cada paso del camino.
FIN.