El lenguaje de las miradas
En un pueblo lejano, vivían dos niñas muy especiales. Martina y Valentina no podían hablar con palabras, pero se comunicaban de una manera muy especial: a través de gestos, expresiones y miradas.
Ellas eran inseparables, y juntas descubrían un mundo lleno de magia y aventuras. Un día, mientras paseaban por el bosque, se encontraron con una mariposa herida. Sin decir una palabra, Martina y Valentina supieron que tenían que ayudarla.
Con cuidado, curaron las heridas de la mariposa y la vieron volar feliz. A partir de ese día, las niñas se dieron cuenta de que su forma de comunicarse era única y maravillosa. Decidieron enseñar a otros niños a comunicarse a través del lenguaje no verbal.
Pronto, su pueblo se llenó de risas, bailes y abrazos, demostrando que el amor y la amistad pueden expresarse de muchas maneras. Martina y Valentina descubrieron que las palabras no son siempre necesarias para transmitir lo que sentimos.
A veces, una mirada puede decir mucho más que mil palabras.
FIN.