El lenguaje del amor



En un tranquilo barrio de Buenos Aires, vivían dos inseparables amigos: Ana, una niña risueña y curiosa, y Lucas, un niño con parálisis cerebral infantil que llenaba de alegría a todos con su sonrisa sincera.

A pesar de las dificultades motrices de Lucas, los dos amigos compartían una conexión especial. Ana siempre estaba al lado de Lucas, entendiendo su lenguaje del amor más allá de las palabras. Juntos jugaban, reían y descubrían el mundo que los rodeaba.

Un día, la escuela organizó una carrera solidaria. Ana decidió que correría empujando la silla de ruedas de Lucas, para que pudieran participar juntos. El esfuerzo fue grande, pero la alegría de Lucas al cruzar la meta era indescriptible.

Su amistad era un ejemplo de amor y solidaridad. Con el apoyo de Ana, Lucas se sentía capaz de lograr cualquier cosa. Juntos demostraron que el amor va más allá de las limitaciones físicas y que la verdadera amistad no entiende de barreras.

Su historia inspiró a todos en el barrio, demostrando que el amor y la empatía pueden superar cualquier obstáculo.

FIN.

Dirección del Cuentito copiada!