El león con poderes de fuego
En la sabana africana vivía León, un león juguetón y curioso. Un día, mientras exploraba, se topó con una brillante piedra roja. Sin pensarlo dos veces, la engulló.
A medida que pasaban los días, León notó que algo extraño estaba sucediendo. Un día, durante un enfrentamiento con hienas que amenazaban a su manada, León descubrió que podía lanzar fuego por la boca.
Al principio, se asustó, pero pronto se dio cuenta de que podía usar este nuevo poder para proteger a los suyos de los peligros. Con la ayuda de sus amigos, León aprendió a controlar sus poderes de fuego y los usó para mantener a salvo a todos los animales de la sabana.
Descubrió que no siempre necesitaba usar el fuego para resolver problemas y que la verdadera valentía radicaba en saber cuándo recurrir a la bondad y la comprensión.
Desde entonces, León se convirtió en un guardián respetado de la sabana, siempre listo para ayudar a quienes lo necesitaran.