El León Diferente y sus Amigos Unidos
Había una vez en el bosque de la amistad, nueve animales muy diferentes entre sí que vivían en armonía y felicidad.
Estaban el conejo Timoteo, el zorro Renato, la tortuga Matilda, el búho Óscar, la jirafa Lila, el oso Bruno, la mariposa Melisa, el elefante Alfredo y el pajarito Simón. Un día, mientras jugaban juntos cerca del lago cristalino del bosque, escucharon un llanto proveniente del otro lado.
Era un cachorrito de león llamado Leopoldo que se sentía triste porque no podía jugar con ellos debido a su melena tan diferente y llamativa. - ¿Qué te pasa Leopoldo? - preguntó Timoteo preocupado. - Nadie quiere jugar conmigo porque soy diferente - respondió Leopoldo con tristeza.
Los nueve amigos se miraron entre sí y sin dudarlo un segundo dijeron al unísono: "¡Nosotros jugaremos contigo!"Así comenzó una hermosa amistad entre los diez animales. A partir de entonces exploraron juntos cada rincón del bosque compartiendo risas, aventuras y aprendizajes.
Cada uno aportaba sus habilidades únicas para ayudarse mutuamente: la velocidad de Timoteo para correr en busca de comida; la astucia de Renato para resolver problemas; la paciencia de Matilda para esperar a todos; la sabiduría de Óscar para dar consejos acertados; la visión privilegiada de Lila desde las alturas; la fuerza de Bruno para proteger al grupo; la delicadeza y belleza de Melisa al volar alrededor; la memoria prodigiosa de Alfredo para recordar caminos y lugares importantes; y finalmente, el canto dulce y alegre de Simón que alegraba sus días.
Pero un día oscuro llegó al bosque cuando una fuerte tormenta azotó el lugar dejando árboles caídos por doquier. Los animales se vieron separados unos de otros sin poder encontrarse. La solidaridad fue clave en ese momento crucial.
- ¡Tenemos que encontrarlos! - exclamó Renato. - Sí, solo trabajando juntos lograremos superar este desafío - agregó Matilda. - Yo puedo volar sobre los árboles caídos para buscarlos desde arriba - propuso Lila.
Con esfuerzo conjunto lograron reunirse nuevamente pero faltaba alguien en medio del desastre: Leopoldo había quedado atrapado bajo un gran tronco imposible de mover por sí solo. - ¡Ayúdenme! - gritaba Leopoldo asustado.
- ¡Todos juntos podemos hacerlo! - dijo Bruno mientras empujaban con todas sus fuerzas hasta liberar a Leopoldo ileso. La alegría inundó sus corazones al estar todos sanos y salvos gracias a su trabajo en equipo. Desde ese día entendieron que era precisamente esa diversidad lo que los hacía más fuertes juntos.
Celebraron su amistad con una gran fiesta donde bailaron, cantaron y juraron estar siempre allí unos para otros sin importar las diferencias.
Y así fue como los diez amigos del bosque demostraron al mundo entero que no importa cuán diferentes seamos exteriormente, lo importante es lo que llevamos dentro: amor genuino por nuestros seres queridos sin importar cómo sean por fuera.
Y colorín colorado este cuento basado en valores ha terminado pero seguirá vivo en cada niño o niña que lo lea recordándoles siempre el poder transformador de la amistad sincera e inclusiva.
FIN.