El libro mágico de Camila y Matías
Había una vez en Perú, dos hermosos pero muy juguetones hermanitos llamados Camila y Matías. Su mamá, Tessy, era una amante de la lectura y desde que ellos nacieron les contaba hermosos cuentos antes de dormir.
Sin embargo, los niños solo querían jugar y ver televisión. Un día, Tessy decidió hacer algo especial para captar la atención de sus hijos hacia los libros. Fue a la librería y compró un libro mágico con poderes especiales.
Al llegar a casa, les mostró el libro a Camila y Matías. "¡Miren lo que encontré! Este es un libro mágico que nos llevará a vivir aventuras increíbles", exclamó Tessy emocionada.
Los ojos de los niños brillaron al escuchar las palabras —"aventuras" e "increíbles". A pesar de su escepticismo inicial, decidieron darle una oportunidad al libro mágico.
Tessy abrió el libro y comenzó a leer en voz alta: "Una vez existió un reino encantado donde todos los sueños se hacían realidad". De repente, sin previo aviso, Camila y Matías fueron absorbidos por el libro y transportados al reino encantado del cuento. Se encontraron en medio de un bosque lleno de árboles gigantes y flores luminosas.
"¡Esto es asombroso!", dijo Matías maravillado mientras exploraban el lugar. A medida que avanzaban por el bosque, se encontraron con personajes fantásticos como hadas parlanchinas y duendes traviesos.
Cada uno tenía una lección importante que enseñarles sobre la importancia de la lectura y la imaginación. El hada Sabina les contó cómo los libros podían transportarlos a mundos desconocidos y llenar su mente de conocimiento.
El duende Lucas les mostró cómo las palabras escritas podían crear imágenes vívidas en sus mentes y despertar su creatividad. Con cada encuentro, Camila y Matías se dieron cuenta de lo maravilloso que era sumergirse en las páginas de un libro.
Descubrieron nuevos lugares, aprendieron sobre diferentes culturas y se emocionaron con cada giro inesperado de la historia. Después de una serie de aventuras emocionantes, Tessy apareció en el reino encantado para llevar a sus hijos de regreso a casa. "¿Les gustó el mundo mágico del libro?", preguntó Tessy sonriendo.
Camila y Matías asintieron emocionados mientras abrazaban el libro mágico con cariño. Habían entendido que leer no solo era divertido, sino también una forma poderosa de aprender e imaginar cosas nuevas.
Desde ese día, Camila y Matías se convirtieron en grandes amantes de la lectura. Cada noche esperaban ansiosos a que Tessy les leyera cuentos antes de dormir. Juntos, exploraron miles de historias fantásticas que alimentaron su imaginación y los ayudaron a crecer como personas curiosas y creativas.
Y así fue como Camila y Matías descubrieron el increíble mundo escondido dentro de los libros gracias al mágico regalo que su mamá les había dado: un tesoro infinito llamado lectura.
FIN.