El libro mágico de Tomás y Lucía
Había una vez un niño llamado Tomás que siempre había soñado con ser mago. Desde pequeño, miraba con asombro los trucos de los ilusionistas en la televisión y se imaginaba a sí mismo haciendo lo mismo.
Sin embargo, su familia no tenía mucho dinero y no podían permitirse pagarle clases de magia. Un día, mientras caminaba por el parque, Tomás encontró un libro muy antiguo tirado en el suelo.
Al abrirlo, descubrió que era un libro de hechizos mágicos. Emocionado, decidió llevárselo a casa para estudiarlo. Durante semanas enteras, Tomás estuvo estudiando y practicando cada uno de los hechizos del libro.
Aunque al principio no le salían bien las cosas y todo parecía ir mal, nunca perdió la esperanza. Un día, mientras estaba practicando sus trucos en el parque, una niña llamada Lucía se acercó a él. "-¡Eso es genial! ¿Puedes enseñarme?".
Tomás estaba sorprendido por la petición pero accedió encantado: "-Claro que sí". Juntos comenzaron a practicar todos los hechizos del libro hasta que ambos eran capaces de hacerlos perfectamente sin ningún error. Pero entonces ocurrió algo inesperado: el libro desapareció misteriosamente.
Lucía y Tomás buscaron por todas partes pero fue imposible encontrarlo. Desanimados por la pérdida del libro mágico decidieron dejar la magia durante un tiempo.
Pasaron varios meses sin hacer nada relacionado con la magia hasta que un día vieron un anuncio en el periódico que decía: "Concurso de magia para niños, ¡el ganador recibirá clases gratis durante todo un año!". Sin pensarlo dos veces, se inscribieron. El día del concurso llegó y ambos niños estaban muy nerviosos.
Pero cuando llegó su turno, hicieron los trucos más increíbles que habían hecho nunca. Y lo mejor de todo es que fueron elegidos como los ganadores. Después de ese día, Tomás y Lucía comenzaron a asistir a las clases de magia todas las semanas.
Aprendieron nuevos hechizos y trucos que les permitieron convertirse en unos auténticos magos. Al final del curso, decidieron hacer una gran actuación para sus amigos y familiares.
Cuando la realizaron con éxito notaron algo extraño: ¡el libro mágico apareció misteriosamente en el escenario! Tomás y Lucía descubrieron que el libro había sido robado por uno de los competidores del concurso. Pero gracias a su perseverancia, habían logrado aprender todo lo necesario sin él.
Desde entonces, Tomás y Lucía se convirtieron en famosos magos gracias a sus impresionantes actuaciones llenas de trucos espectaculares e ilusiones sorprendentes.
Y siempre recordarán la lección más importante que aprendieron: nunca rendirse ante los obstáculos porque cualquier sueño puede hacerse realidad si se trabaja duro para conseguirlo.
FIN.