El Lienzo en Blanco



Era un hermoso día de primavera cuando Luca, un niño curioso con infinitas ganas de explorar, tropezó con una antigua casa blanca al final de su calle. La casa, cubierta de enredaderas verdes, parecía estar esperando a que alguien la descubriera.

- ¡Mirá, Esteven! -exclamó Luca, señalando la casa a su mejor amigo, quien lo acompañaba.

- Está medio abandonada, pero tiene algo mágico -dijo Esteven, acercándose con cautela.

Ambos chicos miraron la puerta, que crujía al abrirse como si reclamara a los visitantes.

- ¿Entramos? -preguntó Luca, con el corazón acelerado.

- ¡Dale! -respondió Esteven, menos temeroso.

Dentro de la casa, todo estaba cubierto de polvo y telarañas, pero los ojos de Luca brillaban al ver un gran lienzo en la pared principal, tan blanco como la nieve.

- Esto es raro. ¿Por qué hay un lienzo aquí? -se preguntó Luca en voz alta.

De repente, una suave brisa pasó por la habitación y comenzó a dibujar colores en el lienzo.

- ¡Mirá! -gritó Esteven.

- ¡Esto es increíble! -respondió Luca.

Los colores danzaban por el lienzo, creando paisajes, criaturas y escenas fantásticas. Luca y Esteven, asombrados, se dieron cuenta de que el lienzo reflejaba su imaginación.

- ¿Y si hacemos algo juntos? -sugirió Luca.

- ¡Sí! ¡Vamos a pintar nuestra propia aventura! -dijo Esteven.

Ambos chicos comenzaron a contar historias mientras pintaban: héroes que salvaban aldeas, mares llenos de tesoros y árboles que hablaban. Cada pincelada llenaba el lienzo de vida.

De pronto, el color se detuvo y el lienzo quedó en blanco nuevamente.

- ¿Qué pasó? -preguntó Luca, confundido.

- Tal vez necesitamos imaginar más -respondió Esteven.

- Pero... ¿y si no sabemos qué más poner? -se lamentó Luca.

- Siempre podemos inventar -respondió Esteven con una sonrisa.

Entonces, decidieron salir a buscar inspiración en el mundo que los rodeaba. Caminándose por el jardín, comenzaron a notar los pequeños detalles: una mariposa que danzaba entre las flores, un pájaro que cantaba en el árbol, y la suave brisa que acariciaba sus rostros.

- ¡Es verdad! Todo tiene una historia -dijo Luca.

- Y ese es el comienzo de nuestra siguiente pintura -agregó Esteven.

De regreso, comenzaron a pintar de nuevo. Esta vez, el lienzo se llenó de un vibrante jardín lleno de flores y criaturas mágicas. De repente, el lienzo vibró y la pintura cobró vida: un pequeño hadita salió volando del lienzo.

- ¡Hola! Yo soy Floria, la guardiana de este lugar -dijo la hadita, sonriendo.

- ¡Hola! -gritaron Luca y Esteven al unísono.

Floria les explicó que el lienzo podía llevarlos a cualquier parte que imaginaran, pero para eso, debían ser valientes y seguir soñando.

- ¿Quieren viajar conmigo? -preguntó Floria.

- ¡Sí! -respondieron los chicos emocionados.

Así fue como, tras pintarle otro milagroso paisaje, Luca y Esteven se encontraron volando sobre un arcoíris, navegando en un barco pirata hacia islas de tesoros y explorando mundos mágicos llenos de criaturas fantásticas.

Cada aventura les enseñaba valiosas lecciones sobre la amistad, el trabajo en equipo, y que no hay límites para la imaginación.

Después de un largo día de aventuras, regresaron a la casa. Agradecieron a Floria por la experiencia y, antes de despedirse, ella les dejó un pequeño frasco de polvo de estrellas.

- Esto les ayudará a recordar siempre que la magia está en su corazón, y todo lo que necesitan hacer es creer en ustedes mismos -dijo Floria.

Los chicos prometieron seguir soñando y pintando mientras miraban al lienzo, que ahora estaba lleno de colores vibrantes y memorias inolvidables.

- Cada día puede ser una nueva aventura si así lo quieres -dijo Esteven.

- ¡Sí! Mi vida es un gran lienzo en blanco y yo soy el artista -concluyó Luca, sonriendo.

Desde ese día, siempre recordaron la magia de aquel lugar, y cada vez que miraban al lienzo, se acordaban de que, con un poco de imaginación y valentía, ¡podían crear su propia historia!

¡Y así, la casa blanca se convirtió en un lugar donde la creatividad floreció, un continuo recordatorio de que, a veces, los mayores tesoros se encuentran en los sueños y la amistad!

Fin.

FIN.

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