El llanto perdido de Sofía

Había una vez, en una pequeña casa en el bosque, una niña llamada Sofía. Sofía era una niña curiosa y feliz, pero un día, sin razón aparente, comenzó a llorar sin parar.

Su papá, muy preocupado, intentó consolarla, pero parecía que nada funcionaba. "Sofía, cariño, ¿qué te sucede?", preguntaba su papá con ternura, pero ella no podía encontrar las palabras para explicar por qué lloraba. Su papá decidió buscar la respuesta en el bosque, donde vivían.

Se adentró entre los árboles y habló con los animales del bosque, quienes le ofrecieron su ayuda. Juntos, el papá y los animalitos del bosque, emprendieron un viaje hacia el corazón de la floresta en busca de la respuesta.

En el camino, se encontraron con desafíos y peligros, pero con valentía y trabajo en equipo lograron superar cada obstáculo. Finalmente, descubrieron que Sofía se sentía triste porque extrañaba a su abuelita, que vivía lejos.

Con esta revelación, el papá de Sofía organizó una visita sorpresa de la abuelita, quien viajó desde lejos para reunirse con su nieta. El encuentro fue mágico, lleno de amor y abrazos.

Desde ese día, cada vez que Sofía se sentía triste, su papá la animaba a hablar sobre sus emociones. Juntos, aprendieron que compartir los sentimientos y buscar soluciones en familia es la mejor forma de superar los momentos difíciles.