El lobo que quería ser amigo



Había una vez en un frondoso bosque, un lobo llamado Lucas. Lucas era un lobo solitario que vivía en las profundidades del bosque, lejos de la civilización.

A pesar de su aterradora apariencia, en realidad Lucas era un lobo amable y cariñoso que anhelaba tener amigos. Sin embargo, los otros animales del bosque siempre huían asustados al verlo. Un día, Lucas decidió emprender un viaje en busca de encontrar la amistad que tanto anhelaba.

En su camino, se encontró con una familia de conejitos que al verlo, corrieron despavoridos. -¡Esperen! No quiero hacerles daño, solo busco amigos! - gritó Lucas. Los conejitos, sorprendidos por las palabras del lobo, se detuvieron y decidieron escucharlo.

Lucas les contó sobre su deseo de tener amigos y les prometió que no les haría daño. Los conejitos, con cierta desconfianza, aceptaron darle una oportunidad a Lucas. Con el tiempo, el lobo y los conejitos se convirtieron en amigos inseparables.

Lucas demostró ser leal, cuidadoso y protector con ellos. Pronto, otros animales del bosque comenzaron a darse cuenta de que Lucas no era el lobo feroz que todos pensaban.

De esta manera, Lucas demostró que con amabilidad, paciencia y honestidad, se puede cambiar la percepción que los demás tienen sobre uno. Finalmente, el lobo solitario encontró la amistad que tanto ansiaba y juntos, disfrutaron de días felices en el bosque, demostrando que la verdadera amistad no conoce de apariencias ni prejuicios.

FIN.

Dirección del Cuentito copiada!