El mapa de la abuela perdida

En un pequeño orfanato en las afueras de la ciudad, vivía Brooks, un niño rubio y risueño de 7 años. Desde que tenía memoria, siempre había soñado con encontrar a su familia perdida.

Todos los días miraba por la ventana del orfanato imaginando cómo serían sus padres y si tendría hermanos. A pesar de no tener una familia propia, Brooks era muy feliz en el orfanato.

Le encantaba jugar con los demás niños y pasar tiempo en el laboratorio del lugar haciendo experimentos. Siempre estaba inventando nuevas mezclas y creando cosas sorprendentes con materiales simples.

Un día, mientras revolvía entre los libros antiguos del orfanato, encontró un mapa polvoriento que parecía indicar la ubicación de una casa abandonada en las afueras del bosque.

Brooks sintió un escalofrío recorrer su cuerpo: ¿podría ser esa la pista que lo llevaría a su familia? Decidido a descubrirlo, Brooks esperó pacientemente a que todos se durmieran esa noche y luego se escapó sigilosamente del orfanato con el mapa en mano. Con valentía y determinación, se adentró en el oscuro bosque siguiendo las indicaciones del viejo pergamino.

Después de caminar durante horas entre árboles altos y sombras misteriosas, finalmente llegó a una pequeña cabaña cubierta de hiedra. Con el corazón latiéndole fuerte en el pecho, tocó la puerta tres veces antes de escuchar pasos acercándose desde adentro.

La puerta se abrió lentamente revelando a una mujer mayor con ojos llenos de lágrimas al ver al pequeño Brooks parado frente a ella. "-¿Quién eres tú?", preguntó la mujer con voz temblorosa. "-Soy Brooks", respondió el niño con timidez.

"-He estado buscando mi familia perdida y encontré este mapa que me llevó hasta aquí. "La mujer se llevó las manos al pecho sorprendida y emocionada al mismo tiempo. "-¡Eres tú! ¡Eres mi nieto perdido!", exclamó mientras abrazaba a Brooks con fuerza.

Resulta que la abuela de Brooks lo había estado buscando incansablemente desde que desapareció en un mercado cuando era solo un bebé. Había hecho todo lo posible para encontrarlo sin éxito hasta ese momento.

Brooks finalmente había encontrado su verdadera familia gracias a su valentía y determinación para seguir adelante incluso cuando las cosas parecían difíciles. A partir de ese día, vivió feliz junto a su abuela quien le enseñó aún más sobre experimentos científicos e inventos asombrosos.

Y así, juntos crearon nuevos mundos llenos de magia y aprendizaje donde cada día era una aventura diferente llena de amor y complicidad entre ellos dos.