El martillo constructor



En el país de las palas, todos los utensilios de construcción vivían juntos en armonía. Las palas eran grandes y fuertes, los destornilladores eran pequeños y precisos, y los martillos... bueno, los martillos eran martillos.

Pero había un martillo que no quería ser como los demás. No le gustaba hacer ruido golpeando cosas o estar siempre al servicio de alguien más. Este martillo soñaba con ser libre y tener una vida diferente.

Un día, este martillo decidió escapar del orfanato donde vivía y explorar el mundo. Caminó por días hasta llegar a un bosque donde encontró a un grupo de animales muy sabios: una lechuza, una ardilla y un zorro.

- Hola amigos - dijo el martillo tímidamente -, soy un martillo que no quiere ser como todos los demás. ¿Podrían ayudarme? - Claro que sí - respondió la lechuza -. Pero primero debes encontrar tu verdadera pasión.

El martillo se quedó pensando durante horas hasta que finalmente se dio cuenta de lo que realmente quería hacer: ¡construir casas para otros! Entonces, la ardilla le enseñó cómo tallar madera para hacer marcos de puertas y ventanas mientras que el zorro le mostró cómo cavar cimientos para bases sólidas.

Después de mucho tiempo practicando sus nuevas habilidades, el martillo decidió regresar al país de las palas para demostrar su talento a todos sus compañeros utensilios.

Sin embargo, cuando llegó allí descubrió algo terrible: una gran inundación había arrasado con todas las casas dejándolos sin hogar. - ¡Necesitamos ayuda! - gritó la pala más grande. El martillo no lo pensó dos veces y se ofreció a construir nuevas casas para todos ellos.

Y así, con su talento y habilidad, empezó a construir una por una las casas de sus amigos utensilios. Cuando terminaron, todos estaban muy felices y agradecidos con el martillo por haberlos ayudado en su momento más difícil.

Desde entonces, el martillo se convirtió en un héroe y fue respetado como uno de los mejores constructores del país de las palas. Y aunque nunca dejó de ser un martillo, descubrió que podía tener una vida diferente siguiendo su corazón y persiguiendo sus sueños.

FIN.

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