El mensaje de los guardianes del bosque

Hace mucho tiempo, en un precioso bosque vivían animales de todas las especies. Ellos eran los guardianes de aquel lugar, cuidando de la flora y la fauna con mucho amor y dedicación.

Pero un día, notaron que los humanos estaban destruyendo su hogar. Los árboles eran talados, las plantas pisoteadas y los animales asustados. Preocupados por lo que ocurría, los guardianes del bosque decidieron tomar una decisión.

Todos se reunieron en el claro del bosque, desde el majestuoso oso hasta el pequeño ratón. - '¡Tenemos que hacer algo para detener a los humanos! Nuestro hogar está en peligro', dijo el zorro con tristeza.

- 'Es cierto, debemos actuar antes de que sea demasiado tarde', agregó la lechuza desde lo alto de un árbol. Fue entonces que el sabio anciano del bosque, el gran águila, se acercó a todos los animales y les habló: 'Amigos, tenemos que darle un mensaje a los humanos.

Necesitamos que comprendan que estamos sufriendo y que si continúan destruyendo el bosque, todos saldremos perjudicados'. Los animales se pusieron de acuerdo en cómo transmitir su mensaje.

Cada uno de ellos dejaría una señal a lo largo del camino de los humanos, para que al verlas, entendieran que debían detenerse y cuidar de la naturaleza. Los ciervos dejarían sus huellas en el barro, los pájaros pintarían el cielo con sus colores y los conejos formarían figuras con las piedras.

Así, poco a poco, los humanos comenzaron a notar las señales. Al principio no entendían, pero con el tiempo, gracias a la perseverancia de los guardianes del bosque, lograron interpretar el mensaje. Decidieron cambiar su forma de actuar, respetando la naturaleza y cuidando del bosque.

Los animales, al observar este cambio, sintieron una gran alegría. El bosque volvió a florecer, los ríos recuperaron su claridad y todos los habitantes, grandes y pequeños, vivieron en armonía una vez más.

Desde entonces, los animales entendieron que juntos podían lograr grandes cosas, y que cuidar de la naturaleza era responsabilidad de todos. Y así, el bosque se convirtió en un ejemplo de convivencia y respeto para todos los que lo visitaban.