El miedo de Alejandro

Alejandro era un niño valiente y decidido, pero todas las noches, al apagar la luz, sentía un miedo terrible. Estaba convencido de que un monstruo se escondía debajo de su cama, esperando a atraparlo en cuanto cerrara los ojos.

La presencia del monstruo lo tenía tan asustado que apenas podía conciliar el sueño. Una noche, Alejandro decidió enfrentar su miedo. Con una linterna en la mano, se armó de valor y se agachó para mirar debajo de la cama.

Pero no vio nada más que polvo y juguetes viejos. Decepcionado, regresó a la cama. De repente, una luz brillante iluminó su habitación. Era el hada de los sueños, una criatura mágica que había venido a ayudarlo. - Hola, Alejandro.

Veo que estás muy asustado - dijo el hada con una voz suave. - Sí, hay un monstruo bajo mi cama y no me deja dormir - respondió Alejandro con tristeza.

El hada sonrió y le explicó a Alejandro que el monstruo no era real, sino un producto de su imaginación. Le contó que todos tienen miedos, pero que es importante enfrentarlos. Juntos, idearon un plan para vencer al monstruo.

Primero, construyeron una fortaleza con almohadas alrededor de la cama para protegerse. Luego, el hada le dio a Alejandro un frasco mágico que contenía valentía y lo animó a rociarse un poco antes de dormir para sentirse más fuerte. Con el correr de las noches, Alejandro se fue llenando de valor.

Al rociarse el contenido del frasco mágico, se sentía cada vez más intrépido. Un día, finalmente se armó de valor y miró debajo de la cama. ¡No había nada! El monstruo que lo atormentaba había desaparecido.

Alejandro comprendió que su valentía y determinación habían vencido su miedo. A partir de ese día, pudo dormir tranquilamente, sabiendo que el verdadero valor está en enfrentar nuestros miedos.

El hada de los sueños se convirtió en su amiga, y juntos vivieron muchas aventuras emocionantes.