El misterio de la biblioteca perdida

En la Escuela Primaria San Martín, las maestras estaban emocionadas por organizar la Gran Feria del Libro. Querían despertar en los alumnos el amor por la lectura.

La biblioteca estaba repleta de libros esperando ser descubiertos, pero algo extraño sucedió: ¡los libros desaparecieron misteriosamente una noche antes del evento! Las maestras, la directora y los alumnos se pusieron en marcha para resolver el enigma.

- 'Tenemos que encontrar los libros antes de la feria, ¡será un desastre si no lo logramos!', exclamó la maestra Marta. - 'Quizás fueron los duendes traviesos que viven en el patio de la escuela', sugirió Facundo, el alumno más imaginativo de quinto grado. Juntos, armaron un plan para buscar pistas por toda la escuela.

Descubrieron huellas sospechosas cerca de la biblioteca y un papel arrugado con un enigma. Con ingenio y trabajo en equipo, lograron descifrar el enigma y siguieron las pistas hasta llegar a un aula abandonada.

Allí encontraron a Lautaro, un niño tímido de sexto grado, rodeado de los libros desaparecidos. - 'Lo siento, solo quería leer un poco en silencio', musitó Lautaro avergonzado.

Las maestras comprendieron que Lautaro solo quería un lugar tranquilo para leer, así que decidieron convertir el aula abandonada en un espacio de lectura especial para él y todos los alumnos. La feria del libro fue un éxito, y todos se sintieron más unidos que nunca.

La aventura los había enseñado que trabajar en equipo y comprender las necesidades de los demás era clave para resolver los problemas. Desde entonces, la escuela se llenó de risas y el deleite por la lectura se volvió una hermosa tradición.