El misterio de la Camiseta que Plantó un Perfume en la Lámpara del Trauma

En una encantadora ciudad, vivía una niña llamada Sofía. Un día, mientras paseaba por el parque, encontró una camiseta especial que brillaba con destellos mágicos. Intrigada, decidió llevársela a casa.

Al llegar, colocó la camiseta en una maceta junto a una planta y, para su sorpresa, la planta comenzó a crecer de manera asombrosa, emanando un delicioso aroma a perfume. Sofía se maravilló ante la magia de la camiseta.

Al anochecer, la habitación se sumió en la oscuridad, y la lámpara del techo cobró vida, emitiendo destellos multicolores. —¿Qué está pasando? —se preguntó Sofía, desconcertada.

La lámpara, que hablaba con voz suave, le explicó que el origen de la magia provenía de la camiseta, una prenda que había sido impregnada con el deseo de traer alegría a quien la encontrara. Sin embargo, la lámpara también le reveló que la camiseta ocultaba un trauma del pasado que debía ser liberado para que la magia fluyera correctamente.

Determinada a ayudar, Sofía se propuso descubrir el origen del trauma. Con la ayuda de la planta, que poseía el don de transmitir recuerdos a través de sus pétalos brillantes, Sofía emprendió un viaje lleno de sorpresas.

Recorrieron bosques encantados, cruzaron ríos de confianza y sorteando obstáculos, finalmente llegaron a un lúgubre castillo donde encontraron a una vieja muñeca olvidada. La muñeca, al ver a Sofía, rompió en llanto y liberó el peso del trauma que la había atormentado durante años.

Al hacerlo, la magia regresó a la camiseta, que comenzó a brillar con mayor intensidad. La lámpara, recuperando su brillo, agradeció a Sofía por su valentía y compasión.

Desde ese día, la magia se mantuvo viva en la camiseta, la planta, la lámpara y la propia Sofía, recordándoles que, a pesar de los traumas, siempre hay luz y esperanza en el horizonte.