El misterio de la cascada encantada

Había una vez una familia que decidió ir de paseo a la hermosa localidad de Viani. En su recorrido, se toparon con un camino rodeado de árboles frondosos y el sonido del agua corriendo.

-¡Miren esa cascada! -exclamó entusiasmado el papá. -¿Podemos ir a verla? -preguntó la hermana menor. Sin dudarlo, se internaron en el bosque siguiendo el agradable murmullo del agua. De repente, escucharon unas risas y cantos suaves. -¿Qué será eso? -se preguntaron sorprendidos.

Se acercaron con cautela y descubrieron a unos duendes jugando alrededor de la cascada. -¡Hola, humanos! -saludó el duende mayor.

-¿Qué hacen por aquí? Los miembros de la familia se miraron asombrados y el papá respondió: -Estábamos paseando y nos llamó la atención esta hermosa cascada. -Bienvenidos a la cascada encantada. Aquí nunca nadie se aburre porque siempre hay algo nuevo por descubrir -explicó el duende. Los duendes invitaron a la familia a jugar y explorar el lugar.

Juntos recorrieron senderos secretos, encontraron tesoros escondidos y aprendieron sobre la importancia de cuidar la naturaleza. Al despedirse, el duende mayor les dijo: -Recuerden que la magia está en los pequeños detalles y en el amor por la naturaleza.

La familia regresó a casa con el corazón lleno de alegría y la mente repleta de aventuras. Desde ese día, cada vez que necesitaban un poco de magia, recordaban su paseo a la cascada encantada en Viani.