El misterio de la mochila perdida
Había una vez en mi lindo colegio, un grupo de amigos muy curiosos y aventureros. Entre ellos estaban Lola, Mateo, Martín y Sofía. Un día, durante el recreo, descubrieron que la mochila de Martín había desaparecido misteriosamente.
- ¡Chicos, mi mochila no está! - exclamó Martín preocupado.
- ¡Espera, no puede ser! ¿Dónde la dejaste? - preguntó Lola con sorpresa.
- La dejé al lado del árbol, pero ahora no está.
Decidieron buscar por todo el colegio, pero la mochila no aparecía por ningún lado. Fue entonces cuando se les ocurrió ir al patio trasero, un lugar al que nunca habían ido antes.
- ¿Creen que alguien la haya llevado para acá? - preguntó Mateo mientras se adentraban en el patio.
- No lo sé, pero es nuestra única pista - respondió Sofía decidida.
Al llegar al patio trasero, se encontraron con un hermoso jardín descuidado y un árbol gigante. Pero justo detrás del árbol, vieron un destello de algo que brillaba.
- ¡Miren, es la mochila de Martín! - gritó Martín emocionado.
- Pero, ¿cómo llegó acá? - se preguntaron todos sorprendidos.
Fue entonces cuando escucharon un ruido entre las ramas del árbol. Al mirar hacia arriba, vieron a un pequeño pajarito que había hecho un nido con pedazos de tela de la mochila de Martín.
- ¡Ese travieso pajarito tomó mi tela para hacer su nido! - exclamó Martín entre risas.
Todos rieron y se abrazaron al darse cuenta de que la mochila de Martín no había sido robada, sino que el simpático pajarito la había utilizado para construir su hogar.
Desde ese día, los amigos aprendieron a no asumir lo peor antes de investigar y a valorar la naturaleza que los rodeaba. Y, por supuesto, cuidaban de que sus mochilas estuvieran bien guardadas para evitar nuevos incidentes.
FIN.