El misterio de la pelota poética


Había una vez en el hermoso barrio de Villa Mágica, un grupo de amigos muy curiosos y juguetones. Entre ellos se destacaba Renato, un niño apasionado por el fútbol y la poesía.

Un día, mientras paseaba por el parque, encontró una pelota muy especial. Esta pelota era diferente a todas las demás, tenía versos y rimas escritos en su superficie. Renato quedó asombrado y decidió mostrarla a sus amigos.

"¡Miren lo que encontré! Una pelota con versos, ¿no es increíble?" exclamó Renato. Sus amigos no podían creer lo que veían. Decidieron investigar el origen de la misteriosa pelota poética. Juntos emprendieron un viaje por todo el barrio, buscando pistas y resolviendo acertijos en su emocionante búsqueda.

En su travesía, descubrieron que la pelota había sido encantada por el espíritu de un poeta antiguo, quien quería inspirar a los niños a través del juego y la poesía.

Con cada verso que encontraban, los niños sentían cómo la magia de la poesía los impulsaba a ser más creativos, imaginativos y comprensivos con los demás. Finalmente, llegaron al viejo teatro abandonado, donde descubrieron al espíritu del poeta. "Gracias por encontrar mi pelota poética, niños. Veo que saben apreciar la belleza de las palabras.

Ahora les entregaré un regalo muy especial", les dijo el espíritu. De repente, la pelota comenzó a brillar y les otorgó a cada niño el don de la inspiración poética.

Desde ese día, los niños de Villa Mágica utilizaron su regalo para escribir versos que llenaban sus corazones de alegría y compartían su amor por la poesía con todo el mundo.

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