El misterio de la tormenta y las criaturas del cielo
Había una vez, en un pequeño pueblo, un niño llamado Lucas. Una noche, Lucas decidió ir a un boliche con sus amigos para bailar y divertirse. Pero de repente, se cortó la luz y una fuerte tormenta comenzó afuera. Con miedo, Lucas decidió regresar a su casa.
Mientras caminaba por las solitarias calles, empezó a notar algo extraño. En medio de la oscuridad, podía ver murciélagos volando de un lado a otro, y algunas gaviotas heridas tratando de refugiarse de la tormenta.
Lucas estaba asustado, pero sabía que debía ayudar a esas criaturas. Decidió buscar a sus amigos para que lo acompañaran. Juntos, se armaron con linternas y salieron a rescatar a los animales.
Al llegar al lugar donde habían visto a las gaviotas, encontraron un nido caído. Con cuidado, levantaron el nido y lo resguardaron bajo un árbol para proteger a los pichones de la tormenta. Luego, buscaron a los murciélagos y descubrieron que se habían asustado por el apagón, pero no estaban heridos.
Con valentía, Lucas y sus amigos lograron rescatar a todas las criaturas que encontraron y llevarlas a un refugio seguro. La tormenta comenzó a ceder, y poco a poco, las luces del pueblo volvieron a encenderse.
A partir de esa noche, Lucas comprendió la importancia de ayudar a los seres vivos que nos rodean, especialmente en momentos de dificultad. Aprendió que, aunque pueda ser aterrador, siempre hay una manera de hacer frente a los problemas y ayudar a quienes lo necesitan.
Desde entonces, Lucas se convirtió en un defensor de la naturaleza y siempre buscó maneras de cuidar a los animales y el medio ambiente.
FIN.