El misterio de las bombas en la escuela de Pepa y Chorch

Pepa y Chorch eran dos amigos inseparables que asistían a la escuela primaria del barrio. Un día, mientras jugaban en el patio, escucharon un fuerte estruendo proveniente del edificio escolar.

Al acercarse, descubrieron que alguien había colocado varias bombas en distintas partes de la escuela. Asustados, corrieron a contarle a la directora, pero se encontraron con que ella también estaba preocupada y llamando a la policía.

- ¡Qué miedo, Pepa! ¿Quién habrá puesto esas bombas en la escuela? - preguntó Chorch, temblando de miedo. - No lo sé, pero no podemos quedarnos de brazos cruzados. Debemos hacer algo para ayudar a resolver este misterio - respondió Pepa con determinación.

Decidieron investigar por su cuenta, recorriendo cada rincón de la escuela en busca de pistas. Encontraron huellas extrañas, papeles rasgados y restos de pólvora. Mientras tanto, la policía evacuaba el lugar y bloqueaba el acceso para mantener a salvo a todos.

Con valentía, Pepa y Chorch siguieron buscando y finalmente descubrieron que el conserje de la escuela había sido obligado a colocar las bombas por un antiguo enemigo de la directora. Con esta información, corrieron a decírselo a las autoridades, quienes arrestaron al culpable y desactivaron las bombas a tiempo.

La escuela volvió a la normalidad, y Pepa y Chorch fueron reconocidos como héroes. Aprendieron que, aunque fueran solo niños, podían hacer una gran diferencia cuando trabajaban juntos y no se dejaban vencer por el miedo.

Desde entonces, su amistad se fortaleció aún más, y siempre estuvieron dispuestos a enfrentar cualquier desafío juntos.