El misterio de las entidades místicas




En un universo paralelo al nuestro, existían tres entidades místicas: la Luna, el Sol y la Tierra. Aunque parecían simples astros en el cielo, en realidad tenían vidas pasadas que nadie en ese mundo recordaba.

La Luna, con su rostro pálido y enigmático, había sido en una vida pasada una valiente guerrera que defendía a los más débiles. El Sol, con su resplandor poderoso, solía ser un sabio consejero que iluminaba el camino de aquellos que lo necesitaban.

Y la Tierra, con su firmeza y fertilidad, una vez fue una amable sanadora que cuidaba de las criaturas heridas. Sin embargo, con el paso del tiempo, estas vidas pasadas se desvanecieron de la memoria de todos.

Un día, la Luna, el Sol y la Tierra se dieron cuenta de que algo faltaba en sus vidas. Decidieron emprender un viaje para descubrir quiénes eran en realidad. Durante su travesía, enfrentaron desafíos y descubrieron que juntos podían recordar su verdadera esencia.

La Luna aprendió a usar su luz para guiar a los demás, el Sol descubrió que su calor podía reconfortar a los afligidos, y la Tierra comprendió que su fertilidad era un regalo para todas las criaturas.

Al final, las entidades místicas entendieron que a veces es necesario mirar hacia atrás para encontrar el propósito en el presente. Y así, con sus memorias restauradas, la Luna, el Sol y la Tierra iluminaron, calentaron y nutrieron el mundo con amor y sabiduría.

FIN.

Dirección del Cuentito copiada!