El misterio de las historias dormilonas
Había una vez un pequeño pueblo llamado Villa Feliz, donde todos los niños eran muy inquietos y siempre estaban jugando con sus celulares.
Pero había algo que preocupaba a los padres de Villa Feliz: los niños no podían dejar de usar sus teléfonos ni siquiera en la cama antes de dormir. Los papás se dieron cuenta de que esto estaba afectando el sueño y el descanso de sus hijos, así que decidieron buscar una solución.
Fue entonces cuando escucharon hablar sobre un viejo misterioso que aparecía en la noche para asustar a los niños que usaban el celular en la cama.
Los padres pensaron que tal vez este viejo podría ayudarlos, así que organizaron una reunión comunitaria para discutirlo. Todos estuvieron de acuerdo en darle una oportunidad al viejo y ver si realmente podía ayudar a cambiar esta situación. Una noche, mientras todos los niños dormían profundamente, el viejo apareció en Villa Feliz.
Era un hombre mayor con barba blanca y ojos brillantes como estrellas. Caminó sigilosamente por las calles hasta llegar a la casa del pequeño Tomás.
El viejo entró silenciosamente por la ventana del cuarto de Tomás y lo vio usando su celular bajo las sábanas. Se acercó lentamente hacia él y le dijo:"¡Niño travieso! ¿No sabes que es malo usar el celular en la cama? Te contaré una historia maravillosa".
Tomás se sobresaltó al ver al extraño hombre pero decidió escucharlo atentamente. El viejo comenzó a contarle sobre las aventuras de un niño llamado Lucas, quien había dejado de jugar con su celular en la cama y había descubierto un mundo lleno de maravillas.
El viejo relató cómo Lucas empezó a leer libros antes de dormir, a soñar despierto sobre lugares lejanos y a tener conversaciones mágicas con las estrellas. Tomás se quedó fascinado con la historia y prometió al viejo dejar de usar el celular en la cama.
A medida que pasaban los días, el viejo visitaba a todos los niños del pueblo y les contaba historias inspiradoras que les hacían olvidarse del celular antes de dormir.
Los niños comenzaron a disfrutar del tiempo en familia, leyendo cuentos, jugando juegos de mesa y teniendo charlas nocturnas sobre sus sueños más grandes. Pronto, Villa Feliz se convirtió en un lugar donde todos los niños dormían tranquilos y soñaban con cosas maravillosas.
El viejo se convirtió en una figura querida por todos los habitantes del pueblo, quienes lo consideraban como su protector nocturno. Con el paso del tiempo, los niños aprendieron que pasar tiempo sin el celular antes de dormir era algo valioso.
Descubrieron que podían usar su imaginación para crear mundos mágicos dentro de sus cabezas y que podían conectarse realmente con las personas que amaban. Y así fue como el viejo logró cambiar la vida de todos los niños en Villa Feliz.
Les enseñó la importancia del descanso adecuado y cómo aprovechar al máximo cada momento sin distracciones tecnológicas. Desde aquel día, Villa Feliz se convirtió en un lugar donde reinaba la alegría y la creatividad.
Los niños se dieron cuenta de que el verdadero tesoro estaba en su imaginación, y no en la pantalla de un celular.
Y así termina esta historia, recordándonos lo importante que es desconectarnos del mundo digital antes de dormir y disfrutar de momentos llenos de magia junto a nuestros seres queridos.
FIN.