El misterio de las nubes y el cielo
Había una vez un lugar mágico donde las nubes y el cielo vivían en armonía. Las nubes eran blancas y esponjosas, y el cielo era de un azul intenso. Un día, las nubes comenzaron a desaparecer misteriosamente. El cielo se puso triste al ver que ya no podía jugar con las nubes. Decidió emprender un viaje en busca de respuestas.
En su travesía, el cielo conoció a Estrellita, una luciérnaga brillante que le mostró el camino hacia el reino de la malvada Bruja Tormenta. La bruja había hechizado a las nubes, convirtiéndolas en oscuras nubarrones que escondían su luz. El cielo entendió que debía hacer algo para salvar a sus amigos.
Con valentía, el cielo enfrentó a la bruja. "Bruja Tormenta, libera a las nubes y devuelve la armonía al cielo", exclamó con determinación. La bruja, sorprendida por la valentía del cielo, accedió a deshacer su hechizo a cambio de una lección de amistad.
El cielo reunió a las nubes y les recordó lo importante que era su amistad para mantener la alegría y la luz en el mundo. Juntos, formaron un pacto de amistad y prometieron cuidarse y apoyarse siempre. La bruja, conmovida, liberó su hechizo y las nubes volvieron a ser esponjosas y blancas, llenando de alegría al cielo.
Desde ese día, el cielo y las nubes jugaron juntos cada tarde, creando formas divertidas que entretuvieron a las estrellas y a todos los habitantes del mundo. La amistad entre el cielo y las nubes se volvió aún más fuerte, y nunca más permitieron que nada ni nadie los separara.
Y así, el cielo y las nubes demostraron que la amistad es un tesoro invaluable, capaz de superar cualquier dificultad.
FIN.