El Misterio de San Jerónimo
En el hermoso pueblo de Sayan, donde el sol siempre brilla, se erigía un imponente cerro llamado San Jerónimo. Muchos decían que no era un simple cerro, sino un volcán extinto que protegía al pueblo.
Tres valientes monjes decidieron subir a la cima llevando con ellos tres cruces para bendecir la montaña. Mientras escalaban, una repentina ráfaga de viento provocó que una de las cruces cayera en un boquerón. Los pobladores, asombrados, murmuraron que el cerro se la había llevado.
Los monjes, sin embargo, no se dieron por vencidos y continuaron su ascenso.
Al llegar a la cima, descubrieron algo maravilloso: el cerro San Jerónimo no era solo un montón de rocas, ¡era un antiguo volcán que alguna vez estuvo lleno de fuego! Los monjes entendieron que la naturaleza merecía respeto y cuidado, así que decidieron regresar al pueblo para compartir su descubrimiento.
Desde entonces, los habitantes de Sayan se comprometieron a cuidar y proteger el cerro San Jerónimo, recordando que la naturaleza es sabia y poderosa, y merece nuestro respeto y gratitud.
FIN.