El Misterio del Banco Violeta

Había una vez en un pueblo encantado, un misterio que nadie lograba resolver. Un día, la valiente Sofía decidió emprender un viaje hacia el misterioso bosque donde se decía que se encontraba el legendario Banco Violeta.

"¿Has escuchado sobre el Banco Violeta, Lucas?", preguntó Sofía a su amigo. "¡Sí, es ese lugar donde se dice que se cumple un deseo si logras encontrarlo!", respondió Lucas emocionado.

Con un mapa en mano, los dos amigos se dirigieron hacia el bosque, sorteando obstáculos y desafíos. "¡Mira, Sofía, una valla! ¡Debemos saltarla para seguir adelante!", exclamó Lucas. Después de superar la valla, se adentraron en el bosque y encontraron un río. "¡Ay, no podemos cruzar este río tan ancho!", se preocupó Sofía.

"Tranquila, tengo una idea. ¿Ves esa baya roja al otro lado? La usaré para construir un bote y cruzar el río", propuso Lucas. Después de construir el bote, lograron cruzar el río y finalmente encontraron el Banco Violeta.

"¡Mira, Sofía, allí está el Banco Violeta! Pero... ¿por qué tiene esa forma tan extraña?", se preguntó Lucas. Al acercarse, descubrieron que el banco en realidad era un árbol violeta increíblemente hermoso.

"¡Es asombroso! Aunque no es un banco como esperábamos, encontramos algo aún más maravilloso", dijo Sofía emocionada. Al tocar el árbol, una luz brillante envolvió a los amigos y escucharon una suave voz que les dijo: "El deseo que se haga con amor y bondad será concedido".

Desde ese día, Sofía y Lucas regresaron al pueblo con la determinación de difundir amor y bondad por doquier.

Cada vez que alguien les preguntaba sobre el Banco Violeta, respondían: "El verdadero Banco Violeta está en nuestro corazón, listo para esparcir amor y bondad por el mundo".