El misterio del bosque encantado

Había una vez, en un pequeño pueblo rodeado de un espeso bosque, un niño llamado Matías. Matías era un niño curioso y aventurero que siempre estaba buscando nuevas emociones y descubrimientos.

Un día, escuchó a los ancianos del pueblo hablar sobre el bosque encantado, un lugar misterioso lleno de secretos y peligros. A pesar de las advertencias, Matías decidió adentrarse en el bosque para descubrir si era verdad lo que decían.

El bosque estaba lleno de árboles gigantes y mágicos, y pronto Matías se dio cuenta de que estaba perdido. - ¿H-hola? ¿Hay alguien ahí? - preguntó Matías con voz temblorosa. De repente, escuchó un ruido extraño y vio una luz brillante a lo lejos.

Decidió seguir la luz y finalmente llegó a un claro en el bosque donde encontró a una familia de duendes. Los duendes eran amigables y le explicaron que el bosque estaba encantado para protegerlo de aquellos que querían hacerle daño.

Matías comprendió que el bosque era un lugar especial que merecía respeto y cuidado.

Agradecido por la lección, Matías volvió al pueblo y contó a todos sobre su aventura en el bosque encantado, enseñándoles la importancia de proteger la naturaleza y respetar los lugares mágicos que nos rodean.