El misterio del bosque seguro

En el bosque de Villa Alegre vivían el sabio búho Ulises, el travieso conejo Curioso, la ágil ardilla Ágata y el valiente oso Valentín.

Juntos formaban el Departamento de Prevención del Delito del bosque, encargados de mantenerlo seguro de los bandidos que acechaban. Una mañana, recibieron informes sobre extraños movimientos cerca del arroyo, por lo que decidieron investigar. En su recorrido, sorprendieron a un grupo de mapaches saqueando la huerta de la señora Tortuga.

Con astucia, Ulises planeó un plan para detenerlos. - ¡Escucha, amigos! - exclamó Ulises con su sabia voz - Debemos trabajar juntos para detener a estos bandidos y proteger nuestro querido bosque. Conejo, tú serás nuestra distracción. Ardilla, vigila desde lo alto.

Y oso, prepara una emboscada. Con rápido movimiento, Curioso se ofreció a distraer a los mapaches, saltando y jugando a pocos metros de ellos. Mientras tanto, Ágata observaba desde las ramas, comunicándose con Ulises por señales.

Poco después, los mapaches, distraídos por el conejo, fueron sorprendidos por Valentín, quien con coraje y decisión logró detenerlos. Juntos, llevaron a los maleantes ante la ley del bosque, la sabia lechuza Jazmín, quien les dio una lección sobre el valor de la convivencia pacífica.

Los animales del bosque celebraron la valentía y astucia del Departamento de Prevención del Delito, reconociéndolos como los guardianes de la seguridad.

Desde entonces, el bosque de Villa Alegre fue un lugar donde reinaba la paz y la armonía, gracias al trabajo en equipo de estos nobles animales.