El misterio del ciclo del agua



Había una vez en un hermoso pueblo llamado Agualinda, donde vivían la pequeña gotita de agua, Aquiles, y su mejor amiga, la brizna de aire, Airelia. Juntos eran inseparables y siempre se divertían explorando el mundo que los rodeaba.

Aquiles era transparente como el cristal y fresco como una brisa veraniega. Le encantaba nadar en ríos y lagos, saltar sobre charcos después de la lluvia e incluso viajar por las tuberías hasta llegar a nuestras casas.

Un día soleado, mientras paseaban por el prado, Aquiles notó algo muy interesante. "Airelia, ¿sabes dónde encontramos agua en la naturaleza?"- preguntó curioso. Airelia sonrió y respondió: "¡Claro que sí! El agua está en muchas partes del mundo.

Podemos encontrarla en los océanos gigantes que cubren gran parte de la Tierra. También hay agua dulce en los ríos, lagos y manantiales". Aquiles asintió emocionado y continuaron su aventura hacia un arroyo cercano.

Allí vieron cómo el sol calentaba el agua del arroyo hasta convertirla en vapor invisible que se elevaba hacia el cielo. "¿Sabes qué pasa con esa agua cuando llega al cielo?", preguntó Aquiles intrigado. Airelia explicó: "Eso es parte del ciclo del agua.

El vapor sube al cielo formando nubes blancas y esponjosas llamadas nubes cumulus.

Cuando las nubes están llenas de vapor de agua, comienzan a enfriarse y el agua se convierte en pequeñitas gotas que forman las nubes grises llamadas nubes nimbus". Aquiles asintió con entusiasmo mientras veía cómo las nubes iban oscureciendo el cielo. "¡Entonces, cuando las nubes están muy cargadas de agua, llueve!"- exclamó emocionado. —"Exactamente" , respondió Airelia.

"La lluvia cae del cielo y alimenta la tierra, los ríos y los lagos para comenzar nuevamente el ciclo del agua".

Mientras continuaban su paseo por Agualinda, Aquiles le hizo otra pregunta a Airelia: "¿Y cómo sabemos qué tiempo hace?"Airelia sonrió y señaló hacia una granja cercana donde un viejo espantapájaros estaba vestido con un abrigo impermeable y llevaba un sombrero alado. "Ese es Don Clima, nuestro amigo espantapájaros. Él nos ayuda a saber qué tiempo hace.

Si está vestido así significa que lloverá pronto. Además, también podemos ver si hay sol o viento observando cómo se mueven las hojas de los árboles o sintiendo si hace frío o calor en nuestra piel"- explicó Airelia.

Aquiles se maravilló ante tanta información nueva e interesante que estaba aprendiendo junto a su amiga Airelia. Desde aquel día, Aquiles entendió lo importante que era el agua en nuestras vidas y cómo viajaba por todo el mundo gracias al ciclo del agua.

También aprendió a observar el clima para disfrutar aún más de sus aventuras con su querida amiga Airelia.

Y así, Aquiles y Airelia continuaron explorando Agualinda, aprendiendo cada día más sobre el agua y el clima, mientras disfrutaban de su amistad y se maravillaban con la belleza de la naturaleza.

FIN.

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