El misterio del Depósito

Martín y sus amigos Catalina, Francisco, Sara y Josefina se reunieron en la casa de Martín para jugar una tarde. Mientras jugaban en el fondo de la casa, descubrieron un viejo depósito que despertó su curiosidad.

"¿Qué creen que habrá dentro de ese depósito?", preguntó Martín.

"Ni idea, pero estoy ansiosa por descubrirlo", dijo Catalina.

Decidieron ir a investigar el misterioso depósito. Al abrir la puerta, descubrieron que estaba lleno de cajas y objetos viejos.

"¡Guau! ¿Qué será todo esto?", exclamó Francisco.

Decidieron empezar a explorar el depósito. Entre las cajas encontraron juguetes antiguos, libros de cuentos, y hasta una caja llena de disfraces.

"¡Miren esto, es como un tesoro escondido!", gritó Sara emocionada.

Mientras exploraban, Martín encontró un álbum de fotos viejas. Al hojearlo, descubrió fotos de su abuelo cuando era joven.

"¡Esto es increíble! ¡Es como un pedacito de la historia de mi familia!", exclamó Martín. Todos sus amigos compartieron su emoción.

Entre risas, juegos y recuerdos, pasaron toda la tarde explorando el depósito. Al final del día, se dieron cuenta de que habían descubierto algo mucho más valioso que juguetes y disfraces. Habían descubierto la importancia de explorar, de mantener viva la curiosidad, y de valorar las historias que guardan los objetos antiguos.

Desde ese día, el depósito se convirtió en su refugio secreto, donde seguían descubriendo nuevos tesoros y creando recuerdos imborrables.