El misterio del faro embrujado

Había una vez en un pequeño pueblo costero de Argentina, un faro antiguo que se decía que estaba embrujado.

Los lugareños evitaban acercarse a él, ya que hablaban de extraños sonidos que provenían de su interior y de luces que se encendían y apagaban misteriosamente en la noche. Un grupo de valientes amigos, Juan, María y Pedro, decidió investigar el misterio del faro embrujado. Armados con linternas y coraje, se dirigieron al faro en la oscuridad de la noche.

Al acercarse, comenzaron a escuchar susurros y risas fantasmales. A pesar del miedo, decidieron seguir adelante. Cuando entraron al faro, se sorprendieron al encontrar un viejo proyector de luces y altavoces escondidos que simulaban los fenómenos paranormales.

Descubrieron que todo era un engaño para asustar a la gente del pueblo y así poder saquear sus casas. Decidieron revelar la verdad a las autoridades y el faro fue restaurado y convertido en un lugar seguro y hermoso para todos.

Aprendieron que, aunque algo parezca aterrador, es importante mantener la calma y enfrentar los miedos para descubrir la verdad.