El Misterio del Grafiti en el Colegio



Había una vez en un colegio muy especial, con muros coloridos y alegres, que de repente amanecieron cubiertos de pintura gris. Todos los niños se sorprendieron al ver los grafitis, pero dos valientes amigos, Mateo y Martina, decidieron investigar.

Primero, encontraron una lata de pintura gris escondida en un arbusto cercano al colegio. Luego, hallaron huellas de manos en la pared, que los llevó hasta un rincón donde descubrieron un dibujo con las iniciales del culpable: Tito R.

'¡Debemos encontrar a Tito R.!', exclamó Martina.

'Es verdad, pero no podemos tomar la justicia en nuestras manos', respondió Mateo.

Los dos amigos buscaron a Tito R. por todos lados, hasta que lo encontraron en el parque. '¡Tito R., sabemos que fuiste tú quien pintó los grafitis en el colegio!', dijo Martina.

'Lo siento, no quería causar problemas. No me gusta la escuela y pensé que sería divertido', se disculpó Tito R.

'No importa, pero debes ayudarnos a limpiar los muros y a crear un mural más bonito', propuso Mateo.

Tito R. aceptó y juntos limpiaron los grafitis. Luego, los tres amigos pintaron un hermoso mural que representaba la amistad, la diversidad y la creatividad. La comunidad escolar los aplaudió y a partir de ese día, Tito R. se convirtió en un estudiante ejemplar y artista reconocido.

Desde entonces, Mateo, Martina y Tito R. aprendieron que todos cometemos errores, pero lo importante es reconocerlos, pedir perdón y convertirlos en algo positivo. Además, descubrieron el valor de la amistad, la empatía y la colaboración.

FIN.

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