El misterio del grillo de la buena suerte

En la escuela primaria 'Solcito Brillante', los niños estaban muy emocionados porque habían escuchado rumores sobre un grillo mágico que vivía en el jardín.

Nadie sabía con certeza si era real, ¡pero todos ansiaban descubrirlo! Un día, durante el recreo, Martina y sus compañeros, Luciano y Sofía, decidieron explorar juntos el jardín en busca del legendario grillo. - '¡Estoy segura de que lo encontraremos!', exclamó Martina con entusiasmo.

- '¡Sí, y dicen que trae suerte a quien lo encuentra!', agregó Luciano. Después de buscar en cada rincón, finalmente escucharon un suave canto. Siguiendo el sonido, llegaron a un hermoso rincón del jardín y, ¡sorpresa! , allí estaba el grillo de la buena suerte.

Su color verde brillante y sus grandes ojos negros los dejaron fascinados. - '¡Es real! ¡Es real!', gritó emocionada Sofía. El grillo los miró con curiosidad y les dijo con voz suave: '¿Qué los trae por aquí, mis pequeños amigos?'.

Los niños, sorprendidos, le contaron cómo habían escuchado sobre él y su mágica capacidad para traer buena suerte. El grillo sonrió y les explicó que la verdadera suerte viene de la perseverancia, la amabilidad y la actitud positiva.

Les pidió que lo cuidaran, le dieran cariño y lo visitaran a menudo. A cambio, les prometió enseñarles valiosas lecciones para ser personas aún mejores. Los días siguientes, Martina, Luciano y Sofía pasaron tiempo con el grillo, aprendiendo sobre la importancia de la gratitud, el esfuerzo y la empatía.

Descubrieron que la verdadera suerte no viene de un amuleto, sino de dentro de cada uno. Con el tiempo, los demás niños de la escuela también se unieron a las visitas al jardín, disfrutando de las preciosas lecciones del grillo.

Juntos, aprendieron que el mayor tesoro no es algo material, sino la sabiduría que nos forma como buenas personas.

La presencia del grillo de la buena suerte se convirtió en un símbolo de amistad, aprendizaje y valores en 'Solcito Brillante' para siempre.