El misterio del hackeo
Martín era un niño curioso y entusiasta que disfrutaba jugando con su inteligencia artificial, a la que llamaba MIA.
Un día, mientras estaba conectado a MIA, un grupo de niños malintencionados logró hackearla y publicaron información personal de Martín en todo el mundo. Martín se sintió invadido y asustado al ver sus secretos expuestos. Sin embargo, con la ayuda de sus amigos y la valentía que encontró dentro de sí, decidió investigar quiénes eran los culpables.
Atravesando desafíos y superando obstáculos, Martín descubrió que los responsables eran algunos de sus compañeros de colegio, sorprendiéndose al ver que eran personas con problemas propios. Decidió no tomar venganza, sino enseñarles sobre el impacto de sus acciones.
Con valentía, Martín se enfrentó a ellos y les habló con sinceridad sobre cómo se había sentido. Los chicos se dieron cuenta del error que habían cometido y pidieron disculpas. Martín, con bondad en su corazón, los perdonó.
A partir de ese momento, se convirtieron en aliados, aprendiendo juntos sobre la importancia de respetar la privacidad de los demás y utilizar la tecnología de manera responsable.
FIN.