El misterio del jardín secreto

En la Escuela Alejandro Gallardo, los alumnos de tercer grado estaban emocionados por el inicio de un nuevo proyecto en el jardín de la escuela.

La maestra Laura les explicó que cada uno de ellos tendría la oportunidad de sembrar y cuidar una planta en el jardín, y que al final del año escolar habría una gran celebración para ver cómo habían crecido. Los niños estaban felices con la idea y comenzaron a planificar qué planta elegirían.

"Yo quiero sembrar girasoles", dijo Martín con entusiasmo. "Yo prefiero plantar rosas", comentó Sofía con una sonrisa. "¡Yo quiero sembrar tomates para hacer salsa de tomate!", exclamó Juan emocionado.

Mientras los niños discutían sobre las plantas que querían sembrar, notaron un rincón del jardín que parecía descuidado y lleno de maleza. Decidieron investigar y descubrieron una puerta oculta entre la vegetación. Con curiosidad, abrieron la puerta y se encontraron con un jardín secreto que parecía abandonado.

Todos se miraron sorprendidos y emocionados por este hallazgo. Decidieron limpiar y arreglar el jardín secreto para convertirlo en su proyecto especial. Con esfuerzo y trabajo en equipo, los niños lograron transformar el jardín secreto en un lugar hermoso y lleno de vida.

Sembraron nuevas plantas, cuidaron de ellas y crearon un espacio mágico en la escuela. Al final del año, el jardín secreto se convirtió en el lugar favorito de todos, donde podían disfrutar de la naturaleza y ver crecer las plantas que habían sembrado.

Los niños aprendieron la importancia del trabajo en equipo, el cuidado de la naturaleza y descubrieron que a veces, las mejores sorpresas se encuentran en los lugares más inesperados.